Hernán Portugal: un hombre con espíritu emprendedor

Hernán Portugal es el CEO y cofundador de Xave World Metaverse. Además, creó más de cinco startups. El CEO adentra en lo que es la vida de un emprendedor apasionado por lo que hace.

Por Malena Gonzales Chaves.

Hernán Portugal en la apertura de CrypStation, empresa que funciona dentro del metaverso de Xave.

Hernán Portugal es un hombre de 48 años apasionado por su trabajo. Actualmente, el metaverso de Xave World, su último proyecto, fue adquirido hace menos de un mes por Crypto Blockchain Industry (CBI), una empresa francesa de inversión. “Todo fue hace un año: desde que armamos la idea, integramos las demás acciones, centralizamos todo en Xave y nos compraron la compañía”, comenta Portugal.

Él, y sus otros cinco socios, fundaron lo que hoy es Xave, un metaverso centrado en la música. Portugal sostiene que es la cuarta revolución tecnológica y que suplantará a la Internet como se la conoce, ya que vendrá a transformar el universo de la música y a democratizar el arte.

Panel interactivo con información de www.xaveworld.com. Autoría propia (M.G.).

GoMusicCity, la ciudad principal dentro de Xave World Metaverse.

El emprendedor, padre de cuatro hijos, nació en Ituzaingó, Zona Oeste. Destaca que su contexto le jugó encontra, que es un escenario que no ayuda a un emprendedor, pero que tiene su contradicción: “A pesar de las complicaciones, seguramente la tenacidad que tenemos hoy, no la tendríamos. Los seis founders de Xave somos personas muy tenaces. Yo siempre digo: somos unos espartanos”.

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“A pesar de las complicaciones, seguramente la tenacidad que tenemos hoy, no la tendríamos. Yo siempre digo: somos unos espartanos”.

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Portugal, se recibió de la Universidad de Morón como licenciado en Relaciones Públicas, siempre con el objetivo de plasmarse en el ámbito musical. Luego, se volcó más al Marketing en donde daba buenos resultados y, más adelante, lo terminó de atrapar la tecnología. “Se juntaron justo tres cosas de muchísimo interés y no soy músico ni productor musical, yo soy comercial”. Agrega: “Yo no puedo pintar ni dos círculos y pintarlos de rojo, soy un desastre. Por ende, me genera admiración un artista que lo pueda hacer”.

Además de pasar la mayor parte de sus horas trabajando, es un fanático del snowboard, del fútbol, del motocross y de la música. Además, está absolutamente en contra de todas las religiones, tildándolas de dogmáticas. “Creo en las energías, en los distintos cursos de las distintas vidas y en la evolución del alma”, subraya.

El CEO disfruta viajar, juntarse con amigos, con sus hijos, siempre que tenga el tiempo para hacerlo. Se define a sí mismo como alguien que tiene un “espíritu emprendedor” y declara: “Me gusta muchísimo la trinchera, el inicio del proyecto. Después, cuando se estabiliza y crece ya no me despierta lo mismo”.

Pero, todo emprendimiento conlleva sacrificio: “Mi día a día es bastante intenso, pero es divertido. Trabajo más de quince horas. A las cinco de la mañana ya estoy operativo por la diferencia de horarios con de EE. UU. y Europa”.

Cuando se le preguntó por un consejo para quienes quisieran emprender, respondió sin dudar que no se buscaran los proyectos por el dinero, sino por algo que los apasione: “Emprender es para un perfil que le guste mucho el fuego, mucha dinámica y mucha pasión”, concluye.